Para acabar con ETA en siete días

8 de marzo de 2006.

Para acabar con ETA en siete días, hacen falta dos cosas:

-Querer acabar, de verdad, con ETA.

-Y aplicar una metodología basada en el raciocinio, no en la negociación.

Las dos son condiciones necesarias y suficientes. Si la primera es cierta, el proceso es como sigue:

Primero, hay que resolver una pregunta digna de los Caballeros del Santo Grial: "¿A quién sirve ETA?" (ETA es también la izquierda abertzale; sí, porque ETA y sus amos necesitan tontos útiles para practicar la kaleborroka con el fin de intimidar aún más al pueblo vasco). Y hay que saber hallar la respuesta, que es muy sencilla: al nacionalismo vasco, que es la nazi derecha vasca, heredera del criminal racista y xenófobo Sabino de Arana; es decir el PNV y la Iglesia católica vasca.

Para acabar con ETA, sígase la siguiente receta: 1º. Se agarra por los cojones económicos a la derecha vasca y se la amenaza con menos autonomía y ningún fuero ni concierto económico vasco. 2º. Se agarra por el mismo lugar a la Iglesia Católica Vasca, que es la misma que la española, y se la amenaza con acabar con el Concordato. Se les dan a ambos una cocción lenta, en su jugo, de quince días, antes de aplicar las medidas a golpe de Decreto Ley.

Antes de siete días, ETA se entregará al Estado Español, completa, con armas y bagajes; y, de paso, entregará a todos los terroristas islámicos, socios y cómplices encubiertos de matanzas horribles, como la del 11-M.

Sólo como precaución para evitar falsas amenazas y salidas de urgencia, previamente, se hace dimitir a toda la cúpula de Interior, en especial a todos los expertos en lucha antiterrorista del País Vasco, y se les manda a Ceuta y Melilla, y se les sustituye por funcionarios honrados, es decir, sin corruptelas conocidas.

No les va a dar tiempo a adquirirlas. Son sólo siete días...